sábado, 30 de marzo de 2013

Ruta de los puentes


Muchos de nuestros visitantes llegan a Ruente buscando Naturaleza y es que no debemos olvidar que Ucieda es la entrada al Parque Natural Saja Besaya.

Queremos ofreceros una serie de rutas de senderismo, de diferentes niveles por nuestro municipio.

En el Monte Rio los Vados tenemos diferentes opciones, aqui os presentamos la Ruta de los Puentes del Monte Rio los Vados. PRS.-111

Se trata de una ruta cómoda, de 8 km con posibilidad de ampliar a 15 km.

Os dejamos enlaces a diferentes webs en donde se describe magníficamente la ruta.

Mis Rutas de Senderismo
Senderismo Cantabria
Wikiloc








Fiesta del Cocido



La fiesta del Cocido está declarada de Interés Turístico Regional y se celebra el primero domingo de Septiembre.

Cientos de personas se concentran en la Campa de la Casa del Monte, en pleno parque Natural Saja Besaya, con entrada desde la localidad de Ucieda, para degustar un cocido montañés preparado por el equipo de voluntarios del Ayuntamiento de Ruente.


El sábado prepara el borono, del que se hace un reparto gratuito por la noche, y se comienza con la preparación del cocido (hay muchas patatas por pelar, berzas por picar...) y esa noche hay verbena y el tradicional reparto del borono.

El domingo la jornada comienza pronto para los voluntarios, que siguen con la puesta a punto de todo lo necesario para dar las miles de raciones al medio día.

No olvides traer una cacerola, platos, cubiertos, bebida y una mesa o toalla, ah y mucho hambre, ya que nosotros ponemos lo más importante: ¡¡El cocido montañés!! (Recomendación: el cocido sale muy caliente, los "tupper" de plástico fino se suelen estropear ).

¿Te preguntarás qué lleva el borono? Pues es un producto de matanza similar a la morcilla, hecho a base de sangre del cerdo, cebollas fritas, especias, tocino y harina, moldeado en bolas y cocido.

¡¿Todavía no has probado el cocido?! Es uno de los platos más tradicionales de la gastronomía del interior de Cantabria. Necesitamos alubias blancas, berza, patatas y que no falte el acompañamiento: chorizo y morcilla de la buena.



El día antes comienza la preparación a fuego lento.

Las gente se prepara desde muy pronto para recibir sus raciones de Cocido.

Este es el borono preparado para llevar a la cazuela.

Todo se prepara con mucho mimo.

Sabemos que no te vas a poder resistir, mmmm

La música tradicional está presente en la Fiesta del Cocido

viernes, 29 de marzo de 2013

Fiestas del Municipio




Conocer un pueblo es conocer sus fiestas, sus tradiciones y sus gentes, para ello qué mejor que disfrutar con sus vecinos de los eventos municipales:

Para la venta de ganado, es bastante famosa la feria de Ruente, que se celebra el último domingo de Octubre en el paraje conocido como la "nogalea", por la gran cantidad de nogales allí existentes.
Las más importantes fiestas a celebrar son:
Ruente:
  • El 22 de Julio se celebra la Magdalena.
  • El 16 de Agosto San Roque.
  • El 19 de Marzo se celebra la Feria de Ganado de San José.
  • El último domingo de Octubre se celebra la Féria y Concurso Exposición Monográfico Regional de Ganado Vacuno de Raza Tudanca.
Ucieda:
  • En el mes de Junio se celebra el Corpus Christi.
  • El 15 de Agosto se celebra Nuestra Señora.
  • El sábado siguiente a Nuestra Señora, se celebra "La Virgen del Moral".
  • El primer domingo de Septiembre es la fiesta del Cocido Montañés declarada de "Interés Turístico Regional", que tiene lugar en la Casa del Monte, con reparto de raciones a todos los asistentes.
Barcenillas:
  • En Barcenillas festejan a San Sebastián el tercer viernes de Agosto.
Lamiña:
  • Los días 8 y 9 de Septiembre festejan a Nuestra Señora y San Fructuoso.

jueves, 28 de marzo de 2013

Nuestro escudo


Nuestro escudo hace referencia a cada uno de nuestros pueblos:

Ruente: En campo de oro, que simboliza riqueza, un roble simple, simbólico de la abundancia arbórea local, que es su primordial fuente de ingresos, a la par que una constante del paisaje.
Ucieda: En campo de sinople se representa un ciervo pasante al natural, alusivo a la importantisima reserva nacional de venados del Monte Rio de los Vados. 
Barcenillas: Famosa por sus truchas, se ha simbolizado con una trucha de plata, sobre faja de azur en campo de oro. 
Lamiña: Se simbolizó con la figuración de una "lamiña" o sirena, también denominadas Lamias, representadas con cuerpo de mujer de cintura para arriba y como pez de cintura para abajo. 





Oficina de Turismo Municipal

Oficina de Turismo de Ruente:

Nuestra Oficina de Turismo abre durante las épocas de mayor afluencia de visitantes:
Semana Santa y verano (normalmente desde Junio a Octubre), en horario partido de mañana y tarde.

Email: turismoruente@ruente.es
Tlf. 942 70 55 38

¿Conoces nuestra página de Panoramio? ¿y en Minube?

Anímate y sube tus fotos, comparte tus experiencias.




El misterio de la Fuentona

Comenzamos con uno de nuestros emblemas: La Fuentona de Ruente. 

Catalogada como Punto de Interés Geológico, la Fuentona de Ruente es una surgencia natural de agua que brota al pie de una pared de roca caliza. Se caracteriza por manar caudales variables intermitentes, llegando a quedar totalmente seca durante cortos espacios de tiempo, de una forma no periódica. Realmente no hay un patrón definido de comportamiento de sus aguas, la parada puede durar unos minutos o estar sin agua durante varias horas. 

Nacimiento del Arroyo de la Fuentona


Hay diversas teorías entorno a estas secas, algunos autores sostienen que estas interrupciones pueden deberse a la existencia de un sistema sifónico en el interior de la cueva, en el que la presencia de bolsas de aire interrumpe el flujo de agua. 



Este es el plano que nos hizo el Speleo Club Sabadell sobre el desarrollo interno de la cueva.


Fruto del extraño comportamiento del caudal, han surgido infinidad de historias y leyendas, algunas de ellas recogidas por autores como Manuel Llano y Juan Sierra Pando.

Cuenta la leyenda que en la Fuentona hay encantada una Anjana y es ella la que maneja a su antojo el caudal. 

En el siguiente enlace podéis disfrutar de una representación del misterio por "LA COLODRA" con la inestimable colaboración de los vecinos del pueblo. 


Parque de la Fuentona


Existen muchos estudios que identifican la Fuentona con las "Fuentes Tamaricas" descritas por Plinio en el Siglo I d.C.

¿Todavía no conoces la Fuentona? ¿A qué esperas?


Nuestro folleto de la Fuentona de Ruente:


[Publicado en El Diario Montañés, 7 de septiembre de 1905] Cuento de Juan Sierra Pando

Esti era un mozu de Gismana qen iba pa Andalucía pa hacese sevillanu; y diendo p’Andalucia, al llegar a los campus de Estrá se alcontro con una vieja mu viejuca, acurrucá al socaire d’un eseaju. Preguntóle ella á onde iba y de onde era, contestóle él al casu, y enestonces la onjana, porqui aquella viejuca era una onjana, dando un suspiru mu jondu, más jondu, más jondu que el pozu el Amau, que, sigun diz, no tien calu, jué y dijo:
“¡Ay, Ruenti, Ruenti!
Alli tengo yo una hija
encantá en una juenti;
si esa juenti juese mia
no m’iba yo a Andalucía”
Siguió el mozu su caminu y andandu, andandu, llegó a Sevilla y alli estuvo barriendo suelus, fregandu platus, sirviendu cañas y cobrandu lanzas u lo que es lu mesmu, robandu pa’l amu, que ni se lu agradecia ni pagaba, hasta que cansau di aquella briega, viendo quel trabaju era rauchu y l’arrejundia pocu, golviose pa su tierra, más ricu de alifaces que de pesetas. Pos, hijucus de Dios, que golviendu pa su tierra, llego el sevillanu á los Campus de Estrá, allegando a los Campus de Estrá, cátate que va y guelve á alcontrarse con la mesma onjana, acurrucá al socaire del mesmu escaju.
- A la pa e Dios, onjana, dijola él; y jue ella y le dijo:
- De onde eres sevillanu?
Y dijo él, que de Ruenti; y enestonces ella, dandu el suspiru mas jondu que la otra vez, golvié a dicir:
¡Ay Ruenti, Ruenti!
Alli tengu yo una hija
encanta en una juenti.
Ay juenti, si jueras mia
cuantu oru y plata yo te sacaría!
Rumiandu el dichu de la onjana Ilegó el sevillanu a Ruenti, y allegandu a Ruenti, jue y se alcordó de que siendu el entuvia mozueu, oyó conta que cuando la Juenton» se seca, que lo jaz una u dos veces al añu, sin causa conocía de alma mortal, pa golver a manar pasau un ratucu con la mesma juerza que endeantes, salen de la cuevona unos comu sonius de moneas, y es que lus ternplarius están contandu los sus caudaliS . Filandu estu con el dichu de la onjana, dio en cavilar que alli debía haber tesoru, y cavilandu que alli había tesoru, dió en ise tos los días & la Juentona y allí s’estaba las horas muertas dendi que Dios amanecía hasta bien entra la nochi, aguardando la seca, que naide sabe cuandu va a venir, pa entrar en la cueva y salir de una vez de probe si tenía la suerte de dar con el tesoru.
Ellu jue que una noche, que se habla pasau a la santimperie, cuandu ya estaba mediu atereciu, porqui corría un gris que talmenti paecía que llo¬vían anfileres de punta, vio salir del propiu juriacu de que mana el ma¬nantial, una feguruca blanca, pequeñuca, algo jaldía, perú maja como las mesmas rosas, con unus ojucus que relumbraban comu dos luceros, y que de prontu se jue engrandandu, engrandandu, hasta llegar al tamañu corporal. Relochu de to quedóse el sevillanu al vese ante aquella devinidá; peru ella, andandu sobre el agua como si andará por un caminu real, alcereose a el y le dijo:
“Sevillanu, sevillanu; si tu eres hombre leal, tengu de date tos los días, una peseta y un rial peru ha de ser de condición que a dengunu digas na”
Juró el sevillanu, por estas que son cruces, ser callau comu un jisu, y enestonces la ojancanuca encanta, porqui ella era la feguruca blaaca li dijo comu tenia que ir toas las noches a hablala y comu había de golver toas las mañanas» antis qui piaran lus gurriones, y debaju el primer cantu qui metiera la manu, se alcontraría una peseta colunaria peru que si decía palabra a persona viviente, ni golvia a vela a ella, ni golvia a alcontrar mas pesetas.
Dendi aquel dia el sevillanu no falto ni una noche a echar un ratucu di plática con la onjana, ni faltó denguna mañanuca a buscar el sestipendiu iba el mi hombre, metia manu debaju del primer morrillu y sacaba la colu¬naria, reluciente, que paecía cumo recien acuña.
Y asina corrieran días y corrierun meses» y currierun añus y el mi sevi¬llanu sin jincar el jocicu al trabaju de la tierra, ni pensar en golvese a Andalucía y sin dejar de campar común particular bien acomodau de suyu. El no comía borona, el beber de lo guenu de la Nava, él vestir de lo finu comu los señores, el gastar en la bolera y en la taberna como el mas pudienti, el a todas las romerias tirando en alvellanas y rosquillas los rialis comu agua, él a lus torus, cuandu lus había, y a to esto el caudal sin acábasele y sin que naide barruntara de onde podía venile. Pera comu los mengues no huelgan, un día de la Magdalena, que había empinau un pocu mas de la cuenta, jue un amigu y va y le diz en la taberna: Home, sevillanu, yo t’apreciu y porqui te apreciu tengu de icite lu que por el lugar se mormura, y a mi ver con razón, porqui ellu tu estuvistes pocu tiempu en Sevilla y no sería muchu el caudal que pudiste traer, tu no has heredau de dengun indianu, a ti no te ha tocau, al menus que sepamos, la lotería, tu no tienis ventas ni rentas, porqui la tu familia es mas probe que la del tiu Candolías, que no cenaba nunca y almorzaba pocus días, y no embargante, tu gastas comu un mayorazgu y no das golpi al trabaju, de modu y manera que comu quier que las pesetas no s’apañan al pié de los arboles, comu las castañas escalentías, la gente da en decir que si tienes firmau paztu con el de las uñas largas u te has alcontrau el tesoru de lus templa-rius.
Y sí que li alcontré, u cuanti menus algu que’s mu amejau, saltó el mu rufiante; y jué y contó de pe a pa to lo que con la onjana l’había pasau. Pos, amigus de Dios, habis de saber comu aquella nochi, cuandu el sevillanu jué a la Juentona, alcontrose allí con lus mas de lus vecinus del lugar, pe¬ru no vió la onjana. Golvió de madruga y lo mesmu; allí estaban los mozus y tos los casaus de la Nogalea y de Gismana, muchus de Ucieda y de Meca y hasta angunus de Barcenillas y la Miña, jurgandu debaju lus cantus; peru ni la peseta, ni un tarín, ni un mal chavu morunu tan siquiera. La onjanuca había cumpliu su palabra. Y colorin, colorau, esti cuentu s’acabau. ¿Li ha gustau ó no li ha gustau?. -La diré, disgustarme, no me disgusta; pero …
-Perú no li ha alcontrau la enjundia ¿no es esu?. Home hasta mentira paez que una vieja comu yo, que nunca salió de esti lugar, ni anduvo en mas escuela que la de la amiga, y esu para aprender a repasar y hacer calceta, tenga que explícale el ite de las cosas a un siñor tan leiu y escribiu comu usté. Ya li dije qui a las onjanas había qui entendelas y no preguntalas; peru como quier qui yo no soy onjana, voy a ponerselu moliu y cerniu pa qui si enteri. Cuandu el sivillanu del cuentu iba pa Sevilla, la onjana de lus Campus de Estra quisu icile qui pa quien quiria trabajar medius había aqui sobraus sin necesidá d’ir a buscalus a otras tierras; y endimpues, cuandu golvió, comu quier que estaba hechu á acostase tarde y levantase trempanu, toas las nochis, aluegu qui lus otrus aselaban, s’iba el a la Juentona y ponia butrones y metia varales, con lu que cogía truchas y anguilas hasta artase y luegu las vendía comu que; peru enteráronse lus demás, cayeron muchus perrus sobre el mesmu guesu, y ni pa unu ni pa dengunu; de modus si está qui lu qui la onjanuca vinu a hicile jué que en boca cierrá no entran moscas ¿Entendiolu ahora cristianu?.
-Si que lo entendí; pero dígame ¿cree usted que hay esas onjanas?. Comu haber no li diré yo que las haiga; peru ellu algu tien el agua cuandu la bendicen. Lo que si sabré icile es que cuandu yo aprendí esti cuentu, entuvía no se hablan inventan lus carruferriles, ni la letrecidá, ni lus tumóviles y ya era conocíu el dichu de la onjana.
¡Ay juenti si jueras mía
cuantu oro y plata yo te sacaría!
Y a luegu ha veníu unu y a cien pasus de la Juentona ha levantau una frabrica, que por el día asierra mediu monti y por la nochi; sin mas que dalu guelta a un tornillucu, alumbra como si jua de dia, la Iglesia y la taberna y casi toas las casas del lugar; y entuvía la queda juerza pa moler toa la borona del Ayuntamientu con lo que gana el amu el oro y laplata a cestaos. Conqui si esti no alcontró a la onjana, qne venga Dios y lu vea.




Bienvenida

Desde el Ayuntamiento de Ruente os queremos dar la bienvenida a nuestro Blog. 
Os invitamos a disfrutar de nuestro municipio y esperamos que sea una ayuda para conocer nuestro Patrimonio Natural, Cultural y Arquitectónico.
Ven a descubrir los bellos rincones de Ruente. 



Bosque de Ucieda

El municipio de Ruente lo forman 4 pueblos: Ruente, Ucieda, Barcenillas y Lamiña. Todos ellos configuran la imágen de una amplia llanura aluvial ocupada por pastizales y enmarcada por los bosques de frondosas que cubren sus laderas. 
En este bello marco destaca la diversidad de elementos patrimoniales, naturales y culturales, que hacen de este municipio un lugar con un encanto singular y a lo largo del blog os daremos a conocer los lugares más conocidos y rincones inéditos.